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La embajadora Paula Narváez, quien fue elegida recientemente como presidenta del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas además de ser representante permanente de Chile ante ese importante organismo internacional, realizó una interesante charla en la Escuela de Administración Pública respecto del rol de Chile en el Consejo hoy y la importancia de la participación de nuestro país en estas instancias internacionales ocupando un cargo de alta jerarquía. La exministra secretaria General de Gobierno y excandidata presidencial, que se desempeñó asimismo como consejera Presidencial entre los años 2014 y 2016 a 2016 y como especialista del Programa de la Sección de América Latina y el Caribe de ONU-Mujeres, en Nueva York entre los años 2012 y 2014, se refirió al rol que cumple el Consejo Económico y Social de La ONU como centro del sistema del organismo para promover las tres dimensiones del desarrollo sostenible: económica, social y ambiental. Es la plataforma central para fomentar el debate y el pensamiento innovador, forjar consenso sobre cómo avanzar y coordinar esfuerzos para lograr objetivos acordados internacionalmente. También es responsable del seguimiento de las principales conferencias y cumbres de las Naciones Unidas.

La Carta de las Naciones Unidas estableció el ECOSOC en 1945 como uno de los seis órganos principales de las Naciones Unidas, que actualmente preside la embajadora Narváez. La personera señaló el compromiso del organismo en garantizar que éste proporcione una plataforma unificadora para avanzar en la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), “la Cumbre de los ODS de septiembre será un momento crucial en nuestro camino hacia la Agenda 2030; Sería fundamental que el Consejo Económico y Social aprovechara el impulso de la Cumbre de los ODS para apoyar a los países en sus esfuerzos por alcanzar los ODS”, dijo.

Al presentar las prioridades del nuevo mandato de ECOSOC, Narváez subrayó la importancia de aprovechar la orientación política de la institución para ayudar a aliviar las emergencias, centrándose en la crisis de suministro de alimentos y fortaleciendo la ayuda humanitaria, al tiempo que se abordan las brechas en la arquitectura financiera internacional. Añadió que también se centraría en soluciones concretas para la acción climática, promovería la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, al tiempo que fortalecería las instituciones en el contexto del cambio tecnológico e involucraría a la sociedad civil.

Para el director de la Escuela de Administración Pública, profesor Eduardo Muñoz Inchausti, ha sido un honor para la Facultad y para la Escuela, recibir en nuestros salones a la embajadora de Chile de las Naciones Unidas y actual presidenta del ECOSOC de este organismo internacional. Se pudo conversar de temas muy relevantes para la vida cotidiana de las personas, políticas públicas como en materia de educación y cultura, en materia de pobreza y de cambio climático, que tienen su origen en conversaciones y en acuerdos internacionales y que terminan repercutiendo en las políticas públicas de cada uno de los países. Es la valoración, digamos, del multilateralismo, de las relaciones entre estados, del derecho internacional como base de las relaciones entre países, es lo que nos mueve y para una carrera como Administración Pública, ver que la institucionalidad no solamente se agota en lo nacional, sino que también hay institucionalidad internacional que aporta a la solución de problemas comunes, es por cierto un orgullo y que además quien lo exponga, sea una embajadora chilena ante Naciones Unidas, nos llena de orgullo. Así que estamos muy contentos con esta actividad”.